
FMI: Los peligros del apalancamiento
En su blog “Diálogo A Fondo”, el Fondo Monetario Internacional (FMI) comenta sobre los peligros del apalancamiento y la capacidad de endeudamiento, ya que es un arma de doble filo. En medio de una fuerte contracción de la actividad económica causada por los confinamientos y las prácticas de distanciamiento social que se implementaron durante la pandemia, las autoridades actuaron para que las empresas y los hogares tuvieran acceso a los mercados de crédito y tomar préstamos para amortiguar la desaceleración, con ello muchas empresas lograron limitar el número de despidos. Y los hogares cortos de dinero pudieron seguir gastando en necesidades como alquiler, luz, gas, y comida.
Se puede definir el apalancamiento financiero como la relación entre el capital propio invertido y el obtenido a través de créditos en un proyecto. A mayor cantidad de dinero procedente de préstamos, mayor apalancamiento. El inversor afronta los periodos de riesgos con sus propios ahorros, los cuales decide no invertir y acumular como colchón ante posibles imprevistos.
Un nivel elevado o un aumento rápido de apalancamiento puede representar una vulnerabilidad financiera, dejando la economía más expuesta a una grave desaceleración de la actividad o una marcada corrección de los precios de los activos. De hecho, las crisis financieras estuvieron precedidas con frecuencia por rápidos aumentos del apalancamiento, denominados a menudo «booms crediticios», menciona el documento.
Como consecuencia de las políticas emitidas en respuesta a la crisis de la pandemia, y la contracción del PIB, el documento señala que, tanto en las economías avanzadas como en las emergentes el endeudamiento incrementó aún más, y el apalancamiento de las empresas aumentó 11 puntos porcentuales del PIB hasta el tercer trimestre de 2020 inclusive. Lo cual ha dejado a las autoridades frente a un dilema. Las políticas acomodaticias (recortes de las tasas de política monetaria en conjunción con expansión cuantitativa para recortar los costos de endeudamiento de empresas y hogares) y las condiciones financieras favorables resultantes han apuntalado el crecimiento, pero también han alimentado un alza del apalancamiento. Dicha alza, si bien es necesaria a corto plazo para proteger a la economía mundial del impacto devastador de la pandemia, puede representar una vulnerabilidad que luego pondrá en peligro la estabilidad financiera.
Señala que las condiciones financieras laxas estimulan la actividad económica a corto plazo, pero a la vez, acarrea un costo. A mediano plazo, el riesgo de que se produzca una fuerte desaceleración se agudiza. Es decir, a corto plazo el estímulo es mayor, pero a mediano plazo los riesgos a la baja se acrecientan. Para las autoridades, la cuestión es cómo evitar que la nueva recuperación corra peligro y, al mismo tiempo, que se produzca una acumulación excesiva de apalancamiento.
La situación que creó la pandemia acerca a los mercados financieros a vivir la misma crisis anterior de 2008, aspectos como la caída en el valor de las acciones, el aumento del precio de los productos de crédito y el bajo precio del petróleo son condicionantes que preocupan. Y más si se unen a la incertidumbre generada por el coronavirus.
De acuerdo con el análisis, hay medidas que las autoridades pueden adoptar para resolver este dilema. Las políticas macroprudenciales, criterios más estrictos de habilitación de los prestatarios, aumento de la capitalización mínima y coeficientes de liquidez para los bancos pueden aminorar la acumulación de apalancamiento en el sector no financiero.
Indica que el apalancamiento de los hogares disminuye cuando los países aprietan las herramientas que aplican a los prestatarios. Cuando aplican regulaciones de liquidez más estrictas a los bancos, el apalancamiento de las empresas baja. Lo mismo ocurre cuando las autoridades de los mercados emergentes intensifican las restricciones de divisas bancarias.
En documento concluye que, en el contexto actual, no es sencillo trazar una trayectoria para el endurecimiento de las regulaciones macroprudenciales. Muchos países están experimentando una incipiente recuperación y una restricción generalizada de las condiciones financieras podría obstaculizar el crecimiento. Aunado a que, las herramientas macroprudenciales están dirigidas exclusivamente a los bancos, en tanto que el suministro de crédito se orienta cada vez más a las instituciones financieras no bancarias. Estos factores representan una razón contundente para que las autoridades se apresuren a aplicar medidas macroprudenciales más restrictivas a fin de atacar los focos de elevada vulnerabilidad, evitando al mismo tiempo una restricción general de las condiciones financieras. Las autoridades también tendrán que crear urgentemente herramientas para hacer frente al apalancamiento más allá del sistema bancario.
Ante tal apalancamiento financiero, los Estados pueden resultar afectados, así como el resto del tejido económico mundial. Lo que conllevará graves consecuencias.
Fuente:
https://blog-dialogoafondo.imf.org/?p=15275
https://www.apd.es/riesgos-apalancamiento-financiero/
“En TLC Asociados desarrollamos un equipo multidisciplinario de expertos en auditorías y análisis de riesgos para asesorar y promover el cumplimiento en operaciones de comercio exterior”.
Para más información o comentarios sobre esta publicación contacte a:
División de Relaciones Institucionales
TLC Asociados S.C.
Prohibida la reproducción parcial o total. Todos los derechos reservados de TLC Asociados, S.C. El contenido del presente artículo no constituye una consulta particular y por lo tanto TLC Asociados, S.C., su equipo y su autor, no asumen responsabilidad alguna de la interpretación o aplicación que el lector o destinatario le pueda dar.
In its blog “Diálogo A Fondo”, the International Monetary Fund (IMF) comments on the dangers of leverage and debt capacity as a double-edged sword. In the midst of a sharp contraction in economic activity caused by the confinements and social distancing practices implemented during the pandemic, the authorities acted to give businesses and households access to credit markets and borrow to cushion the downturn, with many companies managing to limit the number of layoffs. And cash-strapped households were able to continue spending on necessities such as rent, electricity, gas, and food.
Financial leverage can be defined as the ratio of equity capital invested in a project to that obtained through loans. The greater the amount of money from loans, the greater the leverage. The investor faces periods of risk with his own savings, which he decides not to invest and to accumulate as a cushion against possible unforeseen events.
A high level or rapid increase in leverage can represent a financial vulnerability, leaving the economy more exposed to a severe slowdown in activity or a sharp correction in asset prices. In fact, financial crises were often preceded by rapid increases in leverage, often referred to as “credit booms,” the paper notes.
As a consequence of policies issued in response to the pandemic crisis, and the contraction in GDP, the paper notes that in both advanced and emerging economies, indebtedness increased further, with corporate leverage rising by 11 percentage points of GDP up to and including the third quarter of 2020. This has left policymakers facing a dilemma. Accommodative policies (cuts in monetary policy rates in conjunction with quantitative easing to cut corporate and household borrowing costs) and the resulting favorable financial conditions have underpinned growth, but have also fueled a rise in leverage. Such a rise, while necessary in the short term to protect the global economy from the devastating impact of the pandemic, may represent a vulnerability that will later jeopardize financial stability.
He notes that loose financial conditions stimulate economic activity in the short term, but at the same time come at a cost. In the medium term, the risk of a sharp slowdown becomes more acute. In other words, in the short term the stimulus is greater, but in the medium term the downside risks increase. For policymakers, the question is how to prevent the new recovery from being jeopardized and, at the same time, an excessive build-up of leverage.
The situation created by the pandemic brings the financial markets closer to experiencing the same crisis as before 2008, aspects such as the fall in the value of shares, the increase in the price of credit products and the low price of oil are worrying factors. And even more so if they are combined with the uncertainty generated by the coronavirus.
According to the analysis, there are measures that policymakers can take to resolve this dilemma. Macroprudential policies, stricter borrower eligibility criteria, increased minimum capitalization and liquidity ratios for banks can reduce the build-up of leverage in the non-financial sector.
It indicates that household leverage decreases when countries tighten the tools they apply to borrowers. When they apply stricter liquidity regulations to banks, corporate leverage falls. The same is true when emerging market authorities tighten bank foreign exchange restrictions.
The paper concludes that, in the current context, it is not straightforward to chart a trajectory for tightening macroprudential regulations. Many countries are experiencing a nascent recovery and a generalized tightening of financial conditions could hamper growth. Moreover, macroprudential tools are targeted exclusively at banks, while credit supply is increasingly directed to non-bank financial institutions. These factors provide a compelling reason for authorities to move quickly to implement tighter macroprudential measures to address pockets of high vulnerability, while avoiding a general tightening of financial conditions. Authorities will also urgently need to develop tools to address leverage beyond the banking system.
In the face of such financial leverage, states may be affected, as well as the rest of the global economic fabric. This will have serious consequences.
Source:
https://blog-dialogoafondo.imf.org/?p=15275
https://www.apd.es/riesgos-apalancamiento-financiero/
“In TLC Asociados, we develop a multidisciplinary team of experts in audits and risk analysis for consulting and ensuring compliance with foreign trade operations”.
For further information or comments regarding this article, please contact:
Institutional Relations Division
TLC Asociados S.C.
A total or partial reproduction is completely prohibited. All rights are reserved to TLC Asociados, S.C. The content of this article is not a consultation; therefore, TLC Asociados S.C., its team and its author do not assume any responsibility for the interpretations or implementations the reader may have.
Search
Nuestros servicios
- División de Auditoria Preventiva y de Cumplimiento
- División de Certificaciones OEA-NEEC-CTPAT
- División de Certificación en Materia de IVA/IEPS y Recinto Fiscalizado Estratégico
- División de Blindaje Legal
- División de Consultoría
- División de Lobbying
- Gestoría de Permisos Especiales
- Arquitectura Aduanera
- Revista TLC
- Libros TLC